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barbacana

¡Qué envidia me dais!

Acabo de recorrer los últimos registros del blog y vuestra página y sólo se me ocurre decir que me dais mucha envidia.

Envidia porque pudisteis estar en Zaragoza llevando todo el amor y la fuerza de nuestro pueblo ante los pies de la Virgen. ¿Que llovía? ¿Es que importan los obstáculos cuando hay verdadera voluntad?

También me dais envidia porque vais a disfrutar de las Jornadas de Castellología y seguro que sirven para conocer más y mejor nuestra Historia y las posibilidades de futuro que ofrece nuestro patrimonio.

Es envidia porque no puedo estar con vosotros compartiendo tantas y tantas cosas. Esas cosas que nos perdemos los que vivimos alejados de nuestras raíces y de nuestros seres más queridos. Las cosas que de verdad importan.

Sin embargo, me siento muy afortunada porque, a través de estas ventanas que vais abriendo, me permitís asomarme y disfrutar con todos y cada uno de vosotros de los acontecimientos de todo tipo que ahí ocurren.

Saludos.

 

1 comentario

Fernando -

¡¡Que alegría para nosotros Mercedes¡¡ Que alegría que haya personas tan humanas como tú, que se alegra con nuestras alegrías y disfruta con nuestros proyectos. Es muy importante para los que nos asomamos a este blog a contar nuestras historías saber que al otro lado del hilo o en una zona wifi mirnado la pantalla hay gente como tú, que nos lee, que nos aplaude o que tambien nos critica, pero que vive y siente nuestro pueblo como lo sentimos nosotros. Alguna vez lo he contado, en una entrevista que realizaron al escritor peruano Alfredo Bryce Echenique se refería a la diferencia entre escribir con ordenador o sobre una hoja de papel. Recordaba a Saramago "como dice mi buen amigo Saramago, una lágrima nunca ensuciará un e.mail".
Es cierto que la emoción que deriva en lágrimas puede dejar la huella sobre el papel escrito, pero también es verdad que las palabras, cuando de verdad salen del corazón, aunque sean escritas ante la fría pantalla del ordenador, no pueden ocultar la emoción del que la pronuncia.
Así entiendo yo las tuyas, se ven sinceras, alegres y que te brotan de muy, pero que muy desde dentro.
Muchas gracías Mercedes por seguir el devenir de esta tierra y la labor de estos amigos de Barbacana. No se si somos conscientes de la transcendencia histórica de lo que estan haciendo.