EL TRABAJO
Llueve el sol por la mañana
ríos de gasolina por el suelo
humo grís contaminado
arrastra con fuerza el viento
Las agujas del reloj palpitan
tiemblan las manos al volante
chirridos y bocinas suenan
todos quieren ir delante
La jornada laboral espera
el ritmo lento de las horas
triste la distancia del encuentro
con el calor amigo de la casa
Trascurre el día intermitente
suena la campana desbocada
por fín acaba la jornada
y de nuevo manos la volante
4 comentarios
Casimiro -
Mucho han cambiado las cosas desde esas épocas !Afortunadamente!.
Un saludo cordial
Fernando -
Porfi -
Sí, lo que en otras épocas eran chirriantes rodiladas de rueda de hierro de los carros, monotonías de escasos metros que parecían kilómetros por el frío y por la lluvia, pasos de burra pausados y contados, dulces jotas al viento de los Altos de Tabuenca, Chifalos, Mosen Pedro, hasta los Sotos... todo en suave melodía...
Aunque al final como bien díces amigo, ¡la recompensa!.
El llegar a casa, meter las mulas a la cuadra y dejarlas al calor de la paja y del sustento, el abrazar a los niños y escuchar sus cuitas y sus cuentos, el besar a la esposa a escondidas de los ojos perspicaces del que crece cada día, como todas las plantas, como los viñedos, como los cerezos, que esperan poder devolver con creces de loco banquero, todos los premios ganados con esfuerzo y atenciones muy prontito .
.a la vuelta de la esquina, llegada de los años venideros...
Pily E. -
¿ Cuando nos enteraremos que hay medios de transporte, con lo cual dejaremos un poco de lado la contaminación, por humos ( malos humos ) y acústica ?.
Buenos días.