Blogia
barbacana

Dos ancianos, hablando sobre el envejecimiento, y uno le dice al otro:

- La peor parte se la llevan nuestras mujeres, y además ellas se niegan a admitir que envejecen y tratan siempre de esconder sus achaques.

- Tienes mucha razón, pero he encontrado un buen truco para hacerles ver sus discapacidades a través de un sencillo juego: Así, si quieres saber si tu mujer empieza a quedarse sorda, colócate a 10 metros de ella y hazle una pregunta. Después, cuando veas que no te responde, acércate a 5 metros .
Después a 2 metros , y después a 1 metro . Y entonces no le quedará más remedio que darse cuenta que está sorda.

El anciano encuentra que la idea es muy buena y cuando vuelve a casa se coloca a 10 metros de su mujer y le pregunta con voz fuerte:

- Cariño, ¿qué hay de cena?

No recibe respuesta. Entonces se acerca a 5 metros y le pregunta de nuevo:

- Cariño, ¿qué hay de cena?

No recibe respuesta, por lo que se acerca a 2 metros y le pregunta:

- Cariño, ¿qué hay de cena?

No recibe respuesta. El tipo, totalmente asombrado, se aproxima a un metro y grita:

- Cariño, ¿qué hay de cena?

Su mujer se gira y le dice, con cara de exasperación:

- Te lo digo por cuarta vez, ¡¡¡pollo con patatas fritas!!!

1 comentario

Rosa Pili -

Estoy en Barbacana leyendo el blog, y menos mal que acabao con bien el asunto de la sordera, porque sino ya estaba yo pensando que era un escrito un tanto machista, y a mí como que ni el machismo ni el feminismo pues no me gusta. Pero como ha acabado con bien pues...
Un abrazo aunque no sepa quien es el autor invitado.