El adios

Hay veces que algo vuela en el aire, los pensamientos se oscurecen, la mente se ofusca y personas ejemplares, buenas, trabajadoras y familiares, se ven arrastradas a un camino sin retorno.

Jesús decidió marcharse, dejándonos con dolor en el alma y pena en nuestros corazones. Que encuentres la paz, te recordaremos con el mismo cariño que tu nos diste: ¡inmenso!.

 

2 comentarios

[Fernando - 20 de noviembre de 2010 - 20:23]

Casi siempre las noticias de la desaparición inesperada de los seres queridos, un amigo o cualquier conocido con el que convivimos nos produce dolor. No conviene quedarnos con el final de la vida sino con la vida en si, una vida llena y compartida. Jesús siempre fue cercano, responsable, muy trabajador y una persona que le tocó luchar en esta vida dando siempre muestras de una gran entereza. En estos momentos de tristeza, animo y fortaleza para la familia.

[Anónimo - 20 de noviembre de 2010 - 14:28]

ES UNA PENA PERO HAY QUE RESPETAR SU DECISION AUNQUE CONLLEVE GRAN DOLOR PARA SUS SERES QUERIDOS. ANIMO APARA LA FAMILIA XQ LA VIDA SIGUE Y HAY QUE SEGUIR PARA DELANTE. WNIMO PARA SUS HIJOS Y ESPOSA QUE ESTOS MOMENTOS SEGURAMENTE LO NECESITAN.